•lunes, mayo 03, 2010
Las pasadas navidades mi marido me regaló mi primera pluma LAMY. Fue una agradable sorpresa. Es de trazo suave, facil de utilizar y me enamoré de su diseño sencillo. Con el tiempo he descubierto en internet la muy buena fama que tienen éstas plumas entre los dibujantes y entre los amantes de la caligrafía.
Como seguro os habreis dado cuenta, mi letra es un poco fea y decidí hacerme un regalo para intentar mejorarla. Me he comprado una nueva pluma LAMY, ésta vez con una punta adecuada para escribir caligrafía. Añadí dos nuevas puntas para escribir con diferente grosor porque se pueden intercambiar diferentes modelos de punta y también dos nuevas tintas: color verde y color morado. Con ésta herramienta apetece escribir sin parar, además al ponerle estos rizos y lacitos a las letras parece como si estuviera dibujando en vez de escribir.
Estoy entusiasmada, estos pequeños regalitos que me hago de vez en cuando me estimulan a dibujar un poco más y me alientan a mejorar mi estilo. Tengo que confesar que ya estoy considerando comprarme mi siguiente LAMY, me han enganchado totalmente. Os las recomiendo, además, su precio es muy asequible.


Como seguro os habreis dado cuenta, mi letra es un poco fea y decidí hacerme un regalo para intentar mejorarla. Me he comprado una nueva pluma LAMY, ésta vez con una punta adecuada para escribir caligrafía. Añadí dos nuevas puntas para escribir con diferente grosor porque se pueden intercambiar diferentes modelos de punta y también dos nuevas tintas: color verde y color morado. Con ésta herramienta apetece escribir sin parar, además al ponerle estos rizos y lacitos a las letras parece como si estuviera dibujando en vez de escribir.
Estoy entusiasmada, estos pequeños regalitos que me hago de vez en cuando me estimulan a dibujar un poco más y me alientan a mejorar mi estilo. Tengo que confesar que ya estoy considerando comprarme mi siguiente LAMY, me han enganchado totalmente. Os las recomiendo, además, su precio es muy asequible.

