•miércoles, septiembre 22, 2010
Arbustos y árboles de parques y jardines, en un soleado mes de Septiembre en Madrid (España).
El primero que podemos ver en las fotografías adjuntas es el Espino de fuego o Pyracantha coccinea. Los frutos se utilizaban para la preparacion de mermeladas y las semillas se emplearon a veces como sustitutos del café. Actualmente se utiliza sobre todo para la formación de setos. Durante el otoño y aún en invierno, sus frutos aportan una nota de colorido a los espacios verdes.

El Laurel de flor (Adelfa) o Nerium oleander de la siguientes fotografías es un arbusto perennifolio, uno de los más bellos de la región mediterránea, de hasta 6 m de altura. Normalmente florece en primavera y continúa la floración hasta la llegada del otoño. Tiene propiedades medicinales cardiotónicas, parasiticida y estornudatoria, las hojas contienen un veneno usado contra las alimañas y también en enfermedades cardíacas. En dosis elevadas puede ser mortal y los síntomas de envenenamiento son aparición de vómitos, cefáleas, cólicos y desarreglos cardíacos.

Las dos últimas fotografías corresponden al Platano híbrido común, un árbol robusto, elegante y de sombra generosa, uno de los ejemplares más habituales en los jardines, no sólo particulares, sino fundamentalmente en los públicos, siendo una de las piezas vegetales más frecuentes dentro del paisajismo urbano. Pueden llegar a alcanzar los 35 metros de altura. Las ramas son intrincadas, el tronco recto y la corteza de color amarillento y verdoso, formada por placas finas que suelen desprenderse. La flor surge en el mes de abril: normalmente brotan de dos en dos. Por otra parte los frutos tienen forma esférica y maduran en verano.
El primero que podemos ver en las fotografías adjuntas es el Espino de fuego o Pyracantha coccinea. Los frutos se utilizaban para la preparacion de mermeladas y las semillas se emplearon a veces como sustitutos del café. Actualmente se utiliza sobre todo para la formación de setos. Durante el otoño y aún en invierno, sus frutos aportan una nota de colorido a los espacios verdes.

El Laurel de flor (Adelfa) o Nerium oleander de la siguientes fotografías es un arbusto perennifolio, uno de los más bellos de la región mediterránea, de hasta 6 m de altura. Normalmente florece en primavera y continúa la floración hasta la llegada del otoño. Tiene propiedades medicinales cardiotónicas, parasiticida y estornudatoria, las hojas contienen un veneno usado contra las alimañas y también en enfermedades cardíacas. En dosis elevadas puede ser mortal y los síntomas de envenenamiento son aparición de vómitos, cefáleas, cólicos y desarreglos cardíacos.

Las dos últimas fotografías corresponden al Platano híbrido común, un árbol robusto, elegante y de sombra generosa, uno de los ejemplares más habituales en los jardines, no sólo particulares, sino fundamentalmente en los públicos, siendo una de las piezas vegetales más frecuentes dentro del paisajismo urbano. Pueden llegar a alcanzar los 35 metros de altura. Las ramas son intrincadas, el tronco recto y la corteza de color amarillento y verdoso, formada por placas finas que suelen desprenderse. La flor surge en el mes de abril: normalmente brotan de dos en dos. Por otra parte los frutos tienen forma esférica y maduran en verano.